This morning, Gil had a beautiful experience at the hospital as he held Laura's hand and watched her. He said he was filled with great love and peace, and he knows it is from yesterday's fasting and prayers.
Laura is stable, and Gil feels very positive. She is still in critical condition, but she is receiving great medical care. Gil has received messages from people throughout the U.S., Canada, and Central America who have fasted for Laura, and whom he doesn't even know. It touches him deeply.
Today, it happens that Laura's nurse is a member of the LDS Church, as the Laparra Family is. The nurse told Gil today that two of the other nurses, not members of our faith, attended the Gilbert Temple Open House with him because of this situation. The Gilbert Temple is so important to Laura and Gil (and it's where they were walking to when they were hit), so that meant a lot to Gil.
A few days ago, the nurses asked Gil to bring pictures of Laura, so they could see what she looks like normally (without her head shaved and without tubes). So, there are photos of Laura and the family posted on the wall next to her bed. What a beautiful scene that is!
In addition, Gil asked me to tell you this:
He asked Laura's nurse, "What have you learned from being a trauma nurse? How do you stay so positive?"
The nurse said this to Gil, which is what Gil wants to share with you today, "My work teaches me how fragile life is. Our lives can change in a moment. We need to live our lives the best we can, remembering this, so that we will always be found on the Lord's side."
Esta mañana, Gilberto tuvo una experiencia muy bonita en el hospital. Mientras sostenía la mano de Laura entre la suya y la miraba, me dijo que se sintió lleno de paz y amor y que él sabe que ese sentimiento vino del ayuno y las oraciones de ayer.
Laura está estable y Gil se siente muy positivo. La condición de Laura sigue siendo crítica pero ella está recibiendo la mejor atención médica disponible. Gilberto supo de gente en todas partes del mundo que sin conocerles se unió al ayuno por Laura.
La enfermera que está a cargo de Laura hoy, es miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos días (*). La familia Laparra es miembro de esta Iglesia. La enfermera le conto a Gil que otras dos enfermeras que no son de su misma fe, asistieron a la casa abierta del Templo de Gilbert, donde Laura y Gilberto sirvieron como voluntarios en las últimas semanas. Ellas asistieron inspiradas por la historia de Laura.
Un par de días atrás, una de las enfermeras le pio a Gilberto que llevara fotografías de Laura, así el personal del hospital que la atiende puede verla como ella normalmente se ve sin su cabeza rapada y sin todos los tubos. Ahora hay fotos de Laura y su familia en la pared de su cuarto. La vista es hermosa.
Gilberto me pidió que también les dijera esto: “Le pregunte a una de las enfermeras: ¿Qué ha aprendido usted trabajando como enfermera de traumas? ¿Cómo hace para mantenerse positiva?”
La enfermera le contesto (y esto es lo que Gil quiere que todos sepan):”Mi trabajo me enseña que frágil es la vida. Nuestras vidas cambian en un momento. Necesitamos vivir en la mejor forma que nos sea posible, así siempre tendremos a El Señor de nuestro lado”
Nanci Wudel (traducido por Laura Flores)
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